Las ciudades bloqueadas, varios kilómetros de camiones en cada vía. Se acaba el gas, la gasolina y faltan algunos alimentos. En Cochabamba se rebelan los cientos de personas que esperan en la estación de autobuses y les tienen que abrir el bloqueo, por unas horas, para que salgan.

Ya se especula con los precios en algunas ciudades. La policia obliga a abrir la ruta La Paz–Oruro.

El policia sonríe cuando le digo que soy extranjero y que quiero salir de aquí. No es su problema. El gobierno dice que no hay diálogo. El pueblo empieza a estar hasta la polla y algunos agricultores empiezan a plantearse reunirse para obligar a que quiten los camiones. Se les pudre los productos.

En Sucre hoy es la ciudad de los Zombies. Hay huelga de taxistas y buses. Han cortado las calles y no hay forma de ir a ningún lado, ni siquiera a donde estan los camiones para preguntar qué está pasando. Algunos locales no pueden volver a sus ciudades a trabajar, algunos extranjeros se asustan al descubrir que no van a poder llegar al aeropuerto donde tienen un vuelo para largarse de aquí. Pero hay algunos taxis para este servicio.

La gente transita por las calles vacías de autos, y todos los extranjeros al vernos, andando como zombies buscando información que comer, nos preguntamos si alguien sabe algo. Nada. Paro indefinido.

Nosotros ya estamos desesperados. Buscamos un avión, no hay nada hasta el domingo y tiene que ser de primera. Nos planteamos largarnos del país cuanto antes.

Hay que esperar a mañana. Dicen que miremos la tele a ver si sale algo. El policia vuelve a reirse cuando le pregunto como podemos hacer los extranjeros para salir del país. Un local dice, «vuela a Santa Cruz, que está el aeropuerto internacional, y te vas a Madrid«. Solo le ha faltado añadir «y que te den por el culo«.